Luego de seis años de su divorcio con el actor Brad Pitt, la actriz ganadora del Óscar Angelina Jolie demandó a su expareja por una impactante cifra de 250 millones de dólares ¿la razón? un negocio de vinos que ambos compartían en Francia. Meses antes los abogados del actor habían señalado que su pareja dañó la reputación de la compañía, rompiendo acuerdos internos y vendiendo su parte a un “extraño”. El viñedo en cuestión es el Chateau Miraval, el cual fue adquirido por la pareja en 2008 por 45 millones de euros. Adicionalmente, estos íconos de Hollywood compraron una mansión aledaña en la localidad de Provenza al sureste de Francia.
Lo que en un momento se convirtió en el lugar de su matrimonio y de decenas de vacaciones ahora ha tomado matices más oscuros y la causa de múltiples divisiones. En la demanda de Jolie, presentada por la compañía Nouvel LLC, la intérprete de 47 años afirma que Pitt “y sus aliados” tomaron “acciones ilegales y maliciosas” con la intención de dañarla “al devaluar sus inversiones y privarle del papel que le corresponde en la gestión de Chateau Miraval, el mundialmente famoso productor de vino rosado”. Adicionalmente, en el comunicado difundido a través de la cadena CNN, Angelina Jolie especifica que, quien fue su esposo por más de 11 años, creó una campaña “multifacética” durante años con la intención de hacerse con el control total de sus propiedades.